En este libro, parte memoria y parte historia colectiva, Malala no sólo explora su propia experiencia de adaptarse a una nueva vida al mismo tiempo que se añora el hogar, sino que también comparte las historias personales de algunas de las jóvenes extraordinarias que ha conocido en sus viajes: jóvenes que han perdido su comunidad, su familia y con frecuencia el único mundo que han conocido.