El relato cuenta las andanzas revolucionarias de un extraño personaje que debe boxear para ayudar a la causa antiporfirista. Su retrato psicológico y la densidad que consigue, a la hora de narrar la pelea con un estadounidense feroz, crean una atmósfera muy peculiar que rompe con el esquema habitual. Rivera pelea sólo con el propósito de comprar armas para la lucha revolucionaria y para ello se juega, literalmente, la vida. London, inspirado en la vida de Joe Rivers, seudónimo de un revolucionario que ayudaba a la Junta Revolucionaria Mexicana en el exilio, capturó muy bien los sentimientos de muchos mexicanos de la época que estaban dispuestos a poner todo de sí para contribuir al avance de las fuerzas contestatarias.