Durante la II Guerra Mundial, la joven Juliet Armstrong es reclutada por un oscuro departamento del MI5. Su labor consistirá en rellenar fichas sobre británicos simpatizantes con los países del Eje. Un trabajo que le resultará unas veces tedioso y otras aterrador. Pero cuando la guerra llega a su fin, da por hecho que dejará atrás los sucesos de aquellos años para siempre. Ya finalizada la contienda, y embarcada en otros destinos profesionales, un hecho fortuito hace que se le aparezcan viejos fantasmas del pasado que la enfrentarán, por un lado, a una situación muy compleja en el presente y, por otro, la obligarán también a reformular las convicciones y las calificaciones que mantenía sobre aquellos con los que convivió en la dura batalla de la guerra. Esta situación someterá a Juliet a una tensión nada fácil de digerir, pues, además de ver seriamente comprometido su presente, verá también resquebrajarse buena parte de las convicciones que cimentan sus valores y su personalidad.