Así empieza la trágica historia de dos estudiantes, clara y Ramón, quiene, opuestos superficialemente, pero extraordinariamente similres en su naturalez única, retratan la inmensa, inquietante, conmovedora y desgarradora vida de las y los adolescentes.
Contada desde el punto de vista de la profesora de literatura, la historia se desarrolla en el transcurso de un semestre. Muestra por qué los apodos Gato y Lobo son, más que un simple nombre, una forma de comportamiento y un estilo de vida para los protagonistas de esta narración, al grado de quela may´ría de sus compañeros y profesores se refieren a ellos como tal, siendo pocos quienes conocen y usan sus nombres reales.